El pasado domingo 16 de julio se realizó el Festival Alternativo 2012 en "La Capilla" de Capital Federal. De la jornada participaron Ubika, Club Astrolabio, Rosario Blefari y Fanfarron, la banda del ex violero de Los Brujos, San Martin Vampires y Adicta.
En una noche histórica, de la cual tocaron tres músicos que conformaron la ya mítica Movida Sónica de los noventa o el Nuevo Rock Argentino, pudimos hablar con Fabio Rey, ex guitarrista de Los Brujos, quien habló de su actual proyecto Fanfarron, la escena under local, y el recuerdo de la Movida Sónica de los noventa, sin dejar de lado su paso en Los Brujos, al cual deslizó la posibilidad de un posible regreso...
Después de muchos años vuelve un Festival Alternativo, ¿es una manera de recrear la movida de los ´90?
-Yo creo que sí, esa era la idea. Es un poco mostrar la música que esta fuera del circuito mainstream… que hoy por hoy es mucha. Es juntarnos entre los músicos, seguir adelante y proponer una forma alternativa en cuanto a la música, en lo que se refiere al estilo. Si bien se puede decir que, lo alternativo que surgió en los noventa fue como el rótulo que se le puso a la música de esa época que tenía un sonido y una identidad particular, que para mí fue el último movimiento de rock con identidad en cuanto a la década. Por ejemplo, vos decís noventa tienen una música y una identidad particular, decís los ochenta y también, decís los setenta, sesenta y lo mismo. Decís dos mil y es como que no se sabe… es todo junto al mismo tiempo. Cambió todo, la forma de comunicación, lo que sería el significado del rock dentro del sistema… Por ahí antes el rock era un lugar donde, de alguna manera, los músicos tratábamos de transgredir ciertas normas. Yo siempre entendí que el rock era eso. Me parece que hoy en día, ya el rock es parte de la cultura mundial; ahora todo convive al mismo tiempo.
Luego de Los Brujos, cada integrante siguió su propio proyecto, pero vos con Fanfarrón hiciste algo totalmente diferente a lo que venías realizando.
-En cuanto a lo musical, sí. En cuanto a estar en el “lado incorrecto”, haciendo algo que no encaja en ningún lado, me parece que ahí sigo en el mismo camino. Tal vez antes había más espacio para eso, después de lo que pasó con la tragedia de Cromañón, y más allá de lo doloroso que sucedió con las muertes y de la manera, a partir de ahí en adelante lo que sucedió es que no hay lugares para que los grupos nuevos, y aquellos que tienen algo distinto para mostrar, no tengan su lugar. Antes estaba Cemento, posteriormente Cromañón, y eso se nota. Yo creo que eso es fundamental, no sería lo mismo si esa tragedia no hubiera pasado. Si Cemento hoy existiera, lo mismo que Cromañón, pasaría otra cosa.
¿Se fue de un extremo al otro con los espacios de música para que los artistas emergentes puedan desarrollarse su arte?
-Y sí. Lo que pasó con Cromañón, por decirlo de alguna manera, le vino muy bien a lo que sería el sistema comercial del rock, porque el monopolio absorbió todo, entonces es: o el mainstream o nada, el medio no existe hoy por hoy. Lo que sería under hoy por hoy no está, por eso este Festival Alternativo es un poco una reivindicación, es tratar de ver de que manera se puede continuar con eso, que está bastante desigual con respecto a como están planteadas las cosas hoy en día.
¿Notaste en el ambiente quedó aquella influencia de los noventa, sobre todo en las bandas nuevas?
-Sí, totalmente.
¿Qué recuerdos te quedan de aquella época noventosa?
-Lo primero que se me viene a la mente es la letra del tema de Gardel, “que veinte años no es nada…”. Honestamente, yo siento que fue ayer. El recuerdo casi es muy fresco, como si esto hubiera pasado hace una semana atrás, todo lo que viví en los noventa.
¿Extrañas algo de eso o seguís hacia delante con tu proyecto?
-No… es extraño. Yo vivo el presente. Estoy agradecido de haber vivido esa época. Me digo “que bueno que viví ese momento y todo eso”. Haber vivido eso… Los Brujos, el lugar que tenemos en el rock, era un sueño que yo tenía, o sea que el sueño se me cumplió. Y el sueño que yo tenía era tocar y cantar, que es lo que estoy haciendo ahora, es como que de alguna manera cumplí mi sueño y estoy en una etapa de mucha tranquilidad, disfrutando el momento. Por qué? Bueno, tengo 45 años, una hija, formé una familia, me separé, etc… entonces ahora disfruto las cosas. No pienso tanto… no tengo más expectativas que las de seguir tocando y seguir adelante. Se que lo que hago esta como bastante difícil que entre en algún lugar, ya que es muy folclórico para los rockeros, y muy rockero para los folclóricos, entonces estoy ahí bollando pero un poco empezando. Lo que yo pienso con respecto al rock es seguir tu instinto de hacer lo que queres hacer, y eso es lo que sigo haciendo. Hago lo que quiero hacer, entonces ese espíritu está dentro mío, no veo otra forma de hacer las cosas. Hoy por hoy para vivir hago otras cosas, pero lo que yo siento por la música lo sentí desde siempre. Siempre tuve claro que ese era mi norte, y yo soy fiel a eso, no importa el estilo de música que haga, soy fiel a ese sentimiento.
Se nota tu cariño hacia Los Brujos, sobre todo porque en vivo haces un cover de El Dragón, quizás uno de los mejores temas de la banda…
-Es un tema que siempre me gustó, y que con Los Brujos tocamos muy poco en vivo… Es un tema de mi primo, el otro violero (Gabriel Guerrisi), que de alguna manera fue el fundador de la banda, y lo toco como en un homenaje hacia él… Elegí ese tema por lo que significó en el momento en que lo estábamos grabando, de la manera que surgió, etc. Siempre lo quise tocar, y como con Los Brujos hicimos pocas versiones del tema y lo tocamos muy pocas veces, me doy el gusto ahora de tocarlo.
Ya anteriormente hubo una reunión en alguna fiesta privada, ¿se planteó en algún momento un regreso más formal y masivo?
-Sí, se planteó, creo que le estamos buscando la vuelta. Tal vez nos estamos tomando demasiado tiempo jaja!! Sí, se plantea. Y bueno, tiene que suceder algo que yo creo que puede llegar a suceder, que nos encontremos… Todos nos seguimos hablando, tenemos buena relación, y que nos encontremos y digamos: “che, dale, vamos? Y Vamos…” es así, no podría ser de otra manera. En aquella época éramos un volcán, y nos quemamos jaja. El ejemplo de Los Brujos era que éramos puro fuego, y nos incendiamos básicamente, pero fue real ciento por ciento desde el comienzo hasta el final. Fuimos fieles al ideal que teníamos como grupo, y sobrepasamos ampliamente nuestras expectativas, porque la verdad que antes de grabar el disco (Fin de semana salvaje) estábamos completamente corridos de lo que estaba sucediendo musicalmente. Las cosas se dieron de una manera inesperada.
Nosotros nunca hicimos el grupo pensando en ser alternativos, por ejemplo. Decidimos hacer una música que nos gustaba, era una música personal, es rock con un montón de ingredientes que tienen que ver con un montón de influencias y bandas. Pero no éramos como una copia de una banda de afuera versionada o casi como una copia al castellano, eso también me parece que no se veía mucho. Por ahí nosotros teníamos una identidad que se podía notar cuales eran nuestras influencias, pero era una música original. Eso fue lo que hizo que las cosas sucedieran, de hecho íbamos a tocar un solo show… había algo en nosotros, una energía que hizo que el universo un poco se moviera alrededor nuestro en ese momento. Y no sabíamos que estilo hacíamos, lo que pasa que después en los noventa surge la moda de ser alternativo, y todo era alternativo…
En un momento llegó por ejemplo el Festival Alternativo que se hizo con Marilin Manson, Divididos y muchas bandas más, nosotros tocamos ahí y fue un festival criticado, porque no era “alternativo”… Ya era todo alternativo en los noventa, porque era la palabra de moda, pero nosotros estábamos de antes de eso. Cuando aparece lo alternativo es como que dijeron “vamos a meter a Los Brujos acá”, porque por ahí encajábamos perfecto.
En las primeras notas de Los Brujos nosotros decíamos que nuestro estilo era el beatcore, música beat con hardcore. Para nosotros hacíamos beatcore, de repente éramos alternativos, no nos gustaba ese rótulo porque era como que en Musimundo estaba la batea “Alternativo”… Nosotros no íbamos por ese lado, nunca nos autodenominamos alternativos. Hoy tiene otro significado el nombre, porque hoy sí siendo alternativo estas fuera del mainstream, en ese momento si eras alternativo estabas totalmente adentro porque estaba de moda.
¿Entonces los fans pueden tener esperanzas de un regreso? Hasta hay un grupo que tiene un blog en Internet. Y ya hubo varios regresos de otras bandas como Peligrosos Gorriones e Illya Kuryaki and The Valderramas…
-Yo siempre deje la puerta abierta. Yo espero que vuelvan…
Por si faltaba algo en su show, la lista de temas de Fanfarron contó con un tema de los noventa: El Dragón, perteneciente al segundo álbum de Los Brujos, "San Cipriano" del año 1993...
-Y sí. Lo que pasó con Cromañón, por decirlo de alguna manera, le vino muy bien a lo que sería el sistema comercial del rock, porque el monopolio absorbió todo, entonces es: o el mainstream o nada, el medio no existe hoy por hoy. Lo que sería under hoy por hoy no está, por eso este Festival Alternativo es un poco una reivindicación, es tratar de ver de que manera se puede continuar con eso, que está bastante desigual con respecto a como están planteadas las cosas hoy en día.
¿Notaste en el ambiente quedó aquella influencia de los noventa, sobre todo en las bandas nuevas?
-Sí, totalmente.
¿Qué recuerdos te quedan de aquella época noventosa?
-Lo primero que se me viene a la mente es la letra del tema de Gardel, “que veinte años no es nada…”. Honestamente, yo siento que fue ayer. El recuerdo casi es muy fresco, como si esto hubiera pasado hace una semana atrás, todo lo que viví en los noventa.
¿Extrañas algo de eso o seguís hacia delante con tu proyecto?
-No… es extraño. Yo vivo el presente. Estoy agradecido de haber vivido esa época. Me digo “que bueno que viví ese momento y todo eso”. Haber vivido eso… Los Brujos, el lugar que tenemos en el rock, era un sueño que yo tenía, o sea que el sueño se me cumplió. Y el sueño que yo tenía era tocar y cantar, que es lo que estoy haciendo ahora, es como que de alguna manera cumplí mi sueño y estoy en una etapa de mucha tranquilidad, disfrutando el momento. Por qué? Bueno, tengo 45 años, una hija, formé una familia, me separé, etc… entonces ahora disfruto las cosas. No pienso tanto… no tengo más expectativas que las de seguir tocando y seguir adelante. Se que lo que hago esta como bastante difícil que entre en algún lugar, ya que es muy folclórico para los rockeros, y muy rockero para los folclóricos, entonces estoy ahí bollando pero un poco empezando. Lo que yo pienso con respecto al rock es seguir tu instinto de hacer lo que queres hacer, y eso es lo que sigo haciendo. Hago lo que quiero hacer, entonces ese espíritu está dentro mío, no veo otra forma de hacer las cosas. Hoy por hoy para vivir hago otras cosas, pero lo que yo siento por la música lo sentí desde siempre. Siempre tuve claro que ese era mi norte, y yo soy fiel a eso, no importa el estilo de música que haga, soy fiel a ese sentimiento.
Se nota tu cariño hacia Los Brujos, sobre todo porque en vivo haces un cover de El Dragón, quizás uno de los mejores temas de la banda…
-Es un tema que siempre me gustó, y que con Los Brujos tocamos muy poco en vivo… Es un tema de mi primo, el otro violero (Gabriel Guerrisi), que de alguna manera fue el fundador de la banda, y lo toco como en un homenaje hacia él… Elegí ese tema por lo que significó en el momento en que lo estábamos grabando, de la manera que surgió, etc. Siempre lo quise tocar, y como con Los Brujos hicimos pocas versiones del tema y lo tocamos muy pocas veces, me doy el gusto ahora de tocarlo.
Ya anteriormente hubo una reunión en alguna fiesta privada, ¿se planteó en algún momento un regreso más formal y masivo?
-Sí, se planteó, creo que le estamos buscando la vuelta. Tal vez nos estamos tomando demasiado tiempo jaja!! Sí, se plantea. Y bueno, tiene que suceder algo que yo creo que puede llegar a suceder, que nos encontremos… Todos nos seguimos hablando, tenemos buena relación, y que nos encontremos y digamos: “che, dale, vamos? Y Vamos…” es así, no podría ser de otra manera. En aquella época éramos un volcán, y nos quemamos jaja. El ejemplo de Los Brujos era que éramos puro fuego, y nos incendiamos básicamente, pero fue real ciento por ciento desde el comienzo hasta el final. Fuimos fieles al ideal que teníamos como grupo, y sobrepasamos ampliamente nuestras expectativas, porque la verdad que antes de grabar el disco (Fin de semana salvaje) estábamos completamente corridos de lo que estaba sucediendo musicalmente. Las cosas se dieron de una manera inesperada.
Nosotros nunca hicimos el grupo pensando en ser alternativos, por ejemplo. Decidimos hacer una música que nos gustaba, era una música personal, es rock con un montón de ingredientes que tienen que ver con un montón de influencias y bandas. Pero no éramos como una copia de una banda de afuera versionada o casi como una copia al castellano, eso también me parece que no se veía mucho. Por ahí nosotros teníamos una identidad que se podía notar cuales eran nuestras influencias, pero era una música original. Eso fue lo que hizo que las cosas sucedieran, de hecho íbamos a tocar un solo show… había algo en nosotros, una energía que hizo que el universo un poco se moviera alrededor nuestro en ese momento. Y no sabíamos que estilo hacíamos, lo que pasa que después en los noventa surge la moda de ser alternativo, y todo era alternativo…
En un momento llegó por ejemplo el Festival Alternativo que se hizo con Marilin Manson, Divididos y muchas bandas más, nosotros tocamos ahí y fue un festival criticado, porque no era “alternativo”… Ya era todo alternativo en los noventa, porque era la palabra de moda, pero nosotros estábamos de antes de eso. Cuando aparece lo alternativo es como que dijeron “vamos a meter a Los Brujos acá”, porque por ahí encajábamos perfecto.
En las primeras notas de Los Brujos nosotros decíamos que nuestro estilo era el beatcore, música beat con hardcore. Para nosotros hacíamos beatcore, de repente éramos alternativos, no nos gustaba ese rótulo porque era como que en Musimundo estaba la batea “Alternativo”… Nosotros no íbamos por ese lado, nunca nos autodenominamos alternativos. Hoy tiene otro significado el nombre, porque hoy sí siendo alternativo estas fuera del mainstream, en ese momento si eras alternativo estabas totalmente adentro porque estaba de moda.
¿Entonces los fans pueden tener esperanzas de un regreso? Hasta hay un grupo que tiene un blog en Internet. Y ya hubo varios regresos de otras bandas como Peligrosos Gorriones e Illya Kuryaki and The Valderramas…
-Yo siempre deje la puerta abierta. Yo espero que vuelvan…
Por si faltaba algo en su show, la lista de temas de Fanfarron contó con un tema de los noventa: El Dragón, perteneciente al segundo álbum de Los Brujos, "San Cipriano" del año 1993...
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